Lugar: Amaia K.Z. de Irun
Fecha: Sábado, 15 de octubre de 2005
Hora: 20,00
FICHA ARTÍSTICA:
Katiuska María José Santos
Pedro Stakov Juan Tomás Martínez
Principe Sergio Guillermo Orozco
Coronel Bruno Brunovich Enrique Del Portal
Tatiana Amelia Font
Amadeo Pich Luis Bellido
Olga Eva Del Moral
Boni Carlos Bofill
Mishka Mamen Godoy
Koska Ángel Walter
Conde Ivan Adolfo Pastor
Comisario Mariano Galán
Orquesta Antología
Coro Antología
Dirección Escénica Carlos Bofill
Dirección Musical José Antonio Irastorza
FICHA TÉCNICA:
Regidor Luis Villarejo
Director Técnico Alejandro Docarmo
Jefe Tecnico Kip Allan Holley
Diseño de Decorados Mariano Lopez J.R.
Decorados Readecor S.L.
Diseño de Vestuario Paris
Sastrería Luis Llorente
Atrezzo Mateos
Attrezzista Esperanza Ruiz
Diseño de Luces Alex Docarmo
Maquinistas Antonio Lagar J R y Jorge Gonzalez
Transporte Hnos. Hernández
Autocares Salas
Rrpp. María Jesús Sevilla
Maestros Repasadores Celia Laguna y Cristina Alonso
Peluquería Rafael
Gerencia José Ramón Irastorza
Coordinación General Nieves Fdez. De Sevilla
Dirección General José Antonio Irastorza
Antología De La Zarzuela S.L. Producciones
En torno a… KATIUSKA
Pablo Sorozábal, compositor natural de San Sebastián, consiguió su primer gran éxito cuando tras realizar sus estudios en Europa, representó en el Teatro Victoria de Barcelona en el año 1931 su Zarzuela en dos actos “Katiuska”.
¿Por qué ese título y por qué precisamente el estreno en esa ciudad?
La respuesta es muy simple y muestra claramente el “buen ojo” del compositor. En la Barcelona de 1931 había un verdadero frenesí por la música rusa, y los espectáculos rusos de ópera y ballet llenaban temporadas enteras en el Liceu.
La música de “Katiuska” fue escrita precisamente para dar la impresión al auditorio de que estaba escuchando auténtica música rusa. La música no vive sólo de los compositores, aunque éstos sí que a veces vivían sobre todo de un público al que conseguían cautivar. Y en esto Pablo Sorozábal, sin desmerecer ni un ápice su enorme talento como compositor, era todo un artista.
El denominador común de este público era y es aún el de su interés por encontrar en la música de zarzuelas, no una fuente de experiencias intelectuales y estéticas como podía proporcionar una ópera seria italiana o alemana, sino un simple pasatiempo agradable, de ritmos conocidos, de “cantabilidad” asegurada e incluso de diversas connotaciones folklóricas.
En la zarzuela encontramos una tendencia más o menos marcada según las épocas a utilizar ritmos de danzas populares españolas -jotas, zortzikos, boleros, pasodobles, seguidillas y hasta sardanas- y ocasionalmente de origen hispanoamericano -tangos, habaneras, etc.- e incluso de carácter internacional como el vals o el foxtrot.
Por eso cabe aún más resaltar la audacia de Sorozábal en “Katiuska”, de hacernos transportar a un ambiente y a una música que bien podría decirse se asemejaba bastante a la rusa, -algo inédito hasta aquel entonces- salpicándola incluso con algún ritmo “moderno” como en el trío “a París me voy”, que nada tenía que ver con el resto de la partitura, repleta de sus marchas marciales de marcados ritmos rusos, princesas, coroneles zaristas, comisarios del Soviet, etc. que finaliza con un ineludible y muy acertado comentario que incluso hasta quizá en aquel entonces el mismo Sorozábal se formulase...“ Katiuska, Katiuska, ¿qué va a ser de ti? ”